No te conozco, no me importas y no mereces siquiera una mirada. Esa suele ser la actitud, sospechosamente distante, de quienes se traen algún jaleo amoroso en la oficina. Ya saben a lo que me refiero, hacen un despliegue de excesiva indiferencia pero luego resulta que, casualmente, el par de […]
posmodernos y jodidos
Columna sabatina de Alma Delia Murillo.
Día nupcial
El que nunca se queda
Mi primera amenaza
En México está ocurriendo un fenómeno de hostigamiento contra varias mujeres periodistas y columnistas de opinión. Cuando nuestras publicaciones incomodan, recibimos mensajes con amenazas de violación o de muerte. Las redes sociales se han convertido en un tiroteo rutinario, pero no debería ser normal que esto suceda. Algunas compañeras columnistas […]
Ni blancos, ni barbados, ni vencidos
Poquita cosa
Alta tensión
Ella
Leer no sirve para nada
Mujercitas, calladitas
En el prólogo a la edición de Frankenstein del año 1831, Mary Shelley explica por qué escribió semejante monstruosidad. Lo hizo porque los editores —y algunos lectores— no comprendían qué razones podría tener una dulce jovencita para concebir aquella fábula terrorífica. Más allá de la anécdota, reparo en el hecho […]